Washington D.C., 18 de mayo de 2025 – En un comunicado emitido esta tarde, Fox News informó que el ex presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha sido diagnosticado con cáncer de próstata con metástasis ósea, una noticia que ha generado conmoción y un amplio debate en el ámbito político y público. El anuncio, publicado a través de un tuit a las 20:08 UTC, marca un nuevo capítulo en las preocupaciones sobre la salud del ex mandatario, quien dejó el cargo en enero de 2025 tras cumplir su mandato.
Antecedentes médicos y diagnóstico reciente
El diagnóstico llega pocos días después de que se reportara, el 13 de mayo de 2025, la detección de un pequeño nódulo en la próstata de Biden durante un examen físico de rutina, según informó ABC News. Aunque inicialmente no se proporcionaron detalles sobre la gravedad del hallazgo, el anuncio de hoy confirma que el cáncer ha avanzado a una etapa más seria, con metástasis en los huesos, lo que lo clasifica como un cáncer de próstata en etapa IV. Según datos de la Sociedad Americana del Cáncer, la tasa de supervivencia a 5 años para este tipo de cáncer con diseminación a distancia es de aproximadamente un 31%, lo que subraya la seriedad de la condición.
Biden, de 82 años, no es ajeno a los problemas de salud relacionados con el cáncer. En febrero de 2023, durante su presidencia, se le extirpó una lesión cancerosa en el pecho identificada como un carcinoma de células basales. Además, antes de asumir la presidencia, había sido tratado por varios cánceres de piel no melanoma mediante cirugía de Mohs. Estos antecedentes médicos han puesto un foco constante en su estado de salud, especialmente durante su mandato, cuando fue el presidente de mayor edad en la historia de Estados Unidos.
Reacciones y controversias
La noticia ha desatado una ola de reacciones en redes sociales, reflejando la polarización política que ha marcado la carrera de Biden. Mientras algunos usuarios, como Nick Norris y Austin Capps, expresaron sus buenos deseos y oraciones por su recuperación, otros, como Francisco Herrera y MI-TAC Actual, mostraron desdén, criticando duramente su legado político. Helen Sexton, por ejemplo, cuestionó la veracidad del diagnóstico, acusando a la administración de Biden de haber ocultado información sobre su salud en el pasado, incluyendo especulaciones sobre demencia y Parkinson que circularon ampliamente durante su presidencia, pero que nunca fueron confirmadas oficialmente.
Estas especulaciones no son nuevas. En 2024, el Comité de Supervisión y Responsabilidad de la Cámara de Representantes investigó al médico de la Casa Blanca, Dr. Kevin O’Connor, por posibles conflictos de interés debido a sus vínculos comerciales con el hermano de Biden, James Biden, y la empresa Americore Health. La investigación levantó preguntas sobre la transparencia y precisión de los reportes médicos oficiales durante el mandato de Biden, alimentando las sospechas de que su salud podría haber sido más grave de lo informado.
Contexto de salud pública y política
El cáncer de próstata es el segundo cáncer más común entre los hombres en los Estados Unidos, con aproximadamente 1 de cada 8 hombres diagnosticados a lo largo de su vida, según la Sociedad Americana del Cáncer. A nivel mundial, el cáncer de próstata representa un desafío significativo, con 1,276,106 nuevos casos reportados en 2018, de acuerdo con estimaciones de GLOBOCAN. La enfermedad suele ser más prevalente en países desarrollados y puede ser indolente en sus etapas iniciales, pero cuando avanza a metástasis ósea, como en el caso de Biden, el pronóstico se vuelve más complicado.
El diagnóstico de Biden también reaviva el debate sobre la edad y la salud en la política estadounidense. Durante su campaña de reelección en 2024, a los 81 años, su edad fue un tema recurrente, con críticos señalando su aparente fragilidad y episodios de confusión verbal como señales de un posible deterioro cognitivo. Aunque la Casa Blanca desmintió en 2024 que Biden estuviera recibiendo tratamiento para Parkinson, las especulaciones sobre su salud nunca cesaron, y este nuevo diagnóstico podría intensificar esas discusiones.
Perspectiva médica y próximo pasos
El cáncer de próstata con metástasis ósea generalmente requiere un enfoque de tratamiento más agresivo, que puede incluir terapias hormonales, quimioterapia, radioterapia o inmunoterapia, dependiendo de la condición general del paciente. Un usuario de X, Page Buffington, compartió una experiencia personal, señalando que su suegro, quien tuvo un diagnóstico similar, fue tratado con hormonas y pudo llevar una vida normal sin necesidad de quimioterapia. Sin embargo, cada caso es único, y aún no se han revelado detalles sobre el plan de tratamiento de Biden.
Mientras tanto, el ex presidente enfrenta este nuevo desafío en un momento de retiro político, pero bajo el escrutinio público que ha caracterizado su carrera. Su diagnóstico no solo pone de relieve los desafíos de salud que enfrentan los líderes de edad avanzada, sino también las tensiones sobre la transparencia gubernamental en torno a la salud de los funcionarios públicos. A medida que se desarrollen más detalles sobre su condición y tratamiento, el mundo seguirá observando con atención.
Por Tavo Santos
Última actualización: 18 de mayo de 2025, 15:19 EST