Trump juega golf mientras inundaciones en Texas causan tragedia en un campamento cristiano
Kerrville, Texas, 5 de julio de 2025 – Mientras el estado de Texas enfrenta una de las peores tragedias naturales de su historia reciente, con inundaciones devastadoras que han cobrado la vida de al menos 32 personas, incluyendo 14 niñas, y dejado a 27 niñas desaparecidas en el campamento cristiano Camp Mystic, el presidente Donald Trump ha sido visto jugando golf en su club en Nueva Jersey. Las críticas no se han hecho esperar, con usuarios en redes sociales y líderes locales cuestionando la respuesta del presidente ante la catástrofe.
Las inundaciones, desencadenadas por lluvias torrenciales que dejaron entre 4 y 10 pulgadas de agua en el condado de Kerr, han causado estragos en la región del Texas Hill Country. El río Guadalupe creció más de 26 pies en menos de 45 minutos, arrasando con hogares, vehículos y el campamento Camp Mystic, un centro cristiano para niñas con casi un siglo de historia. Entre las víctimas confirmadas se encuentran nueve niñas, y las autoridades continían buscando a 27 menores desaparecidas, según informó el sheriff del condado de Kerr, Larry Leitha.
Mientras los equipos de rescate, incluyendo helicópteros y botes, trabajaban incansablemente para salvar a los afectados, Trump fue fotografiado en su campo de golf en Bedminster, Nueva Jersey. En declaraciones a bordo del Air Force One, el presidente describió las inundaciones como “terribles” y “sorprendentes”, prometiendo apoyo federal a Texas. Sin embargo, su decisión de continuar con su agenda personal ha generado indignación en redes sociales, donde usuarios han contrastado su actitud con la de otros líderes que habrían visitado el lugar de la tragedia para coordinar esfuerzos de rescate.
“Una tragedia de esta magnitud requiere liderazgo inmediato. Mientras Texas llora, el presidente está en un campo de golf. Esto es inaceptable”, escribió un usuario en X, reflejando el sentimiento de muchos. El senador Ted Cruz y el congresista Chip Roy, por su parte, han destacado los esfuerzos de rescate, con más de 850 personas evacuadas y 1,300 efectivos desplegados en la zona.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, anunció que visitará Texas para supervisar las operaciones, y el gobernador Greg Abbott firmó una declaración de desastre para 15 condados, asegurando que Trump “honrará” la solicitud de ayuda federal. Sin embargo, la percepción pública sobre la respuesta del presidente sigue siendo negativa, especialmente tras informes de que los avisos de inundaciones emitidos por el Servicio Meteorológico Nacional no fueron suficientes para prevenir la tragedia en Camp Mystic.
A medida que las lluvias continúan amenazando la región, las autoridades han advertido que el peligro no ha terminado. La comunidad de Texas Hill Country, conocida por sus campamentos de verano y ríos, llora la pérdida de vidas y espera respuestas sobre cómo una tragedia de esta magnitud pudo ocurrir sin evacuaciones previas efectivas.
